Bueno, ahora estoy más ancho que largo en mi nuevo hogar. Y aunque nunca pensé que pudieran salir tantos trastos de 20 metros cuadrados (menuda mudanza oiga), puestos ahora en el piso quedan bastante ridículos. Por ejemplo, mi super-sofá cama ahora parece un silloncito. Además como no tenía muchos muebles y mi nueva casa estaba vacía, ocurren cosas como que tengo que dormir en un colchón sobre el suelo (hasta que compre una cama) o que cada vez que uno habla suena a hueco. La casa también da lugar a sus excesos, porque... ¿para qué necesito dos cuartos de baño en un piso con dos dormitorios?
Por el momento, intentaré disfrutarla mientras la vida me sonría y pueda seguir pagándola. Si llego al verano, podré invitar a los amigos a una barbacoa en la piscina comunitaria.
Por cierto, todavía tengo agujetas de subir cajas y cajas de libros. Todos sin pegatina. Podría haberme desembarazado de algunos, pero en eso discrepo de mi amigo Damn it Jim que, a falta de espacio, se dedica a "suicidar" sus libros en el cubo de basura más próximo. ¿Qué queréis? Tendré una especie de Síndrome de Diógenes que me hace recoger y guardar toda cosa impresa con tapas. Además he perdido un tenedor, ya sólo me quedan cinco. Así que no podré invitar a mucha gente al dia a comer carne. Siempre que lo deseen hacer como personas normales y no a dentelladas.
2 comentarios:
Mi querido coleguilla, Líder entre los Guías, Ayatolá de mi alma,
Mola saber de tu nueva vida de que todo te va bien. Niño Cela y yo también nos mudamos. Pero no sabemos dónde.Sólo sabemos que nos vamos; rumbo a lo desconocido...
Os iremos mantieniendo al corriente.
Besonlosmorros a todos.
Joe... barbacoa en la piscina comunitaria. Qué hambre me acaba de entrar.
Ya me invitarás a ver tu nueva choza. Me da un poco de pena que te hayas mudado, porque antes podía reirme de tu casa y por lo que cuentas ahora me la voy a tener que envainar pero bien.
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